¿Cuál es lo la diferencia entre almendras amargas y dulces?

Published On: febrero 15, 2023

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Si eres fanático de las almendras, es posible que te hayas preguntado alguna vez qué hace que algunas almendras sean amargas y otras dulces. Aunque ambas opciones son ricas en nutrientes y tienen un delicioso sabor, hay algunas diferencias importantes entre ellas.

¿Qué son las almendras amargas?

Las almendras amargas son un tipo de almendra que contiene ácido cianhídrico, un compuesto tóxico que se encuentra en la cáscara de la almendra. Aunque el ácido cianhídrico es peligroso para el ser humano en grandes cantidades, las almendras amargas se tratan para eliminar la mayor parte del ácido cianhídrico antes de ser vendidas como alimento.

Las almendras amargas se utilizan principalmente en la industria alimentaria como ingrediente en productos como el amaretto, un licor italiano, y se utilizan también en algunos platos de cocina tradicionales de Oriente Medio y Asia.

¿Qué son las almendras dulces?

Las almendras dulces, por otro lado, son un tipo de almendra que no contiene ácido cianhídrico y por lo tanto no tienen sabor amargo. Estas almendras se pueden comer directamente del fruto o utilizar en una variedad de recetas, desde postres hasta platos salados.

Además de ser deliciosas, las almendras dulces también son muy nutritivas. Según la Asociación de Almendras de California, una porción de 28 gramos de almendras dulces proporciona:

6 gramos de proteína
4 gramos de fibra
37% del valor diario recomendado de vitamina E
32% del valor diario recomendado de magnesio

6 diferencias entre almendras amargas y dulces

El principal componente químico que diferencia a las almendras amargas de las dulces es el ácido cianhídrico, que se encuentra en la cáscara de las almendras amargas pero no en las dulces.
Las almendras amargas tienen un sabor amargo debido al ácido cianhídrico, mientras que las almendras dulces tienen un sabor más suave y dulce.
Las almendras amargas se utilizan principalmente en la industria alimentaria como ingrediente en productos como el amaretto y en algunos platos de cocina tradicionales de Oriente Medio y Asia, mientras que las almendras dulces se pueden comer directamente del fruto o utilizar en una variedad de recetas.
Las almendras amargas deben tratarse para eliminar la mayor parte del ácido cianhídrico tóxico antes de ser vendidas como alimento, mientras que las almendras dulces no necesitan ningún tipo de tratamiento.
Las almendras dulces son más seguras para consumir en grandes cantidades debido a la ausencia de ácido cianhídrico, mientras que las almendras amargas deben consumirse con moderación debido a su contenido de ácido cianhídrico.
Las almendras dulces tienen una mayor cantidad de nutrientes y beneficios para la salud, como la reducción del colesterol y el riesgo de enfermedades cardíacas, en comparación con las almendras amargas.

¿Cuál es mejor para mi salud?

Aunque ambos tipos de almendras tienen sus propios beneficios para la salud, las almendras dulces son probablemente la opción más segura y nutritiva para la mayoría de las personas. Esto se debe a que las almendras amargas contienen ácido cianhídrico, que puede ser tóxico si se consume en grandes cantidades.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que las almendras amargas tratadas comercialmente tienen muy poco ácido cianhídrico y son seguras para consumir en pequeñas cantidades. Si estás interesado en probar las almendras amargas, asegúrate de comprar solo productos tratados y de seguir las instrucciones de uso y dosificación.

En general, las almendras dulces son una excelente opción para añadir a tu dieta diaria. Además de ser deliciosas, son ricas en nutrientes y tienen un montón de beneficios para la salud. Algunos estudios han demostrado que el consumo regular de almendras puede ayudar a reducir el colesterol y el riesgo de enfermedades cardíacas (1, 2).

¿Cómo puedo incorporar almendras en mi dieta?

Hay muchas formas de añadir almendras a tu dieta diaria. Algunas ideas incluyen:

Agregando almendras picadas a tus batidos o smoothies
Mezclando almendras molidas con avena y agua para hacer una papilla
Añadiendo almendras a tus ensaladas o verduras cocidas
Usando almendras molidas como reemplazo de la harina en recetas de bizcocho o galletas

No importa cómo elijas consumir las almendras, recuerda siempre seguir una dieta equilibrada y variada y no exceder la cantidad recomendada de consumo diario.

Conclusiones

En resumen, la principal diferencia entre las almendras amargas y dulces es que las amargas contienen ácido cianhídrico y las dulces no. Aunque las almendras amargas se tratan para eliminar la mayor parte del ácido cianhídrico, las almendras dulces son la opción más segura y nutritiva para la mayoría de las personas. Las almendras dulces también son ricas en nutrientes y pueden tener beneficios para la salud, como la reducción del colesterol y el riesgo de enfermedades cardíacas. Incorporar almendras en tu dieta diaria es fácil y hay muchas formas de hacerlo, desde añadirlas a batidos o ensaladas hasta usarlas como reemplazo de la harina en recetas de repostería.

Fuentes:

«The Impact of Almond Consumption on Cardiovascular Risk Factors: A Review of the Evidence» – https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5768752/
«Almonds and Cardiovascular Risk: An Update» – https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5706478/

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Perfil del autor

Ana Durán: Ana Durán es una experimentada periodista especializada en medios digitales. Licenciada en Comunicación Social por la Universidad Nacional de Córdoba y con una maestría en Periodismo Digital de la UBA, Ana cuenta con más de 10 años de experiencia en la cobertura y edición de contenidos informativos para portales de noticias y redes sociales.

Originaria de la provincia de Tucumán, Ana demostró un fuerte interés por la comunicación digital durante sus años de estudio. Tras graduarse, realizó una maestría en Buenos Aires donde se formó en redacción web, posicionamiento SEO y analítica de métricas.

En su trayectoria profesional se ha desempeñado como redactora, community manager y editora de importantes medios digitales, optimizando contenidos informativos para su difusión online. Domina técnicas de escritura y edición hipertextual.

Comprometida con el excelente ejercicio del periodismo digital, Ana Durán continúa capacitándose en nuevas tecnologías y canales de comunicación para informar de manera ética, rigurosa y atractiva en la era de la inmediatez y las redes sociales.